El desafío de implementar la Norma ISO 9001:2015 en las organizaciones en Bolivia


La implementación de un Sistema de Gestión basado en la Norma ISO 9001 ha sido desde hace más de dos décadas la opción preferida por cientos de organizaciones de diversos rubros en Bolivia para poder gestionar la calidad de sus productos y servicios y asimismo demostrarla. 


En el mundo más de 1 millón de organizaciones se encuentran certificadas bajo la Norma ISO 9001.

Desde sus primeras  versiones, la ISO 9001 ha ido cambiando paulatinamente y la última versión de la Norma emitida en septiembre de 2015, ha optado por incorporar una serie de cambios necesarios para lograr la adecuación de las organizaciones al sistema de gestión de calidad en contextos cada vez más cambiantes e interactivos.

Actualmente se habla de contextos VUCA, que por su acrónimo en inglés, se refiere a Volátiles, Inciertos, Complejos y Ambiguos, que son resultado de procesos globales como las crisis económicas, entornos altamente competitivos, globalización, desarrollo tecnológico y también de procesos internos tanto económicos como políticos y sociales que a su vez también son influenciados por los externos.

Con estas consideraciones, la nueva versión de la Norma incorpora como requisito la identificación del Contexto de la organización con el fin de poder prever los riesgos que se derivan de éste y de este modo plantear medidas preventivas que reduzcan o eliminen estos riesgos. De hecho la Gestión de Riesgos se plantea como un pilar fundamental que hay que incorporar dentro de la gestión misma de procesos, de modo que habrá que considerar los riesgos asociados a cada proceso relevante dentro del mapa de procesos planteados; lo que nos recuerda la forma de manejar los riesgos tanto en la Norma ISO 22000 como en las OSHAS 18000.

De igual manera, esta nueva versión más allá del enfoque al Cliente únicamente –que sigue siendo un principio de Calidad- y pide identificar las necesidades y expectativas de las partes interesadas relevantes; ampliando la visión de la empresa a un enfoque de RSE (Responsabilidad Social Empresarial), lo que nos lleva a conceptos de la ISO 26000.

Otro requerimiento muy importante es la necesidad de demostrar el compromiso de la Dirección, que como sabemos es la piedra fundamental para cualquier Sistema de Gestión; aunque siempre estuvo implícita, se le da más importancia, al igual que al alineamiento de la Política y Objetivos de Calidad con los Objetivos Estratégicos de la organización, para asegurar la sostenibilidad.

Otra novedad es la Estructura de Alto Nivel (HLS) que será homogénea para todas las Normas de Gestión, cuyo objetivo es alineamiento entre las Normas de gestión en cuanto a los Capítulos, facilitar su integración y aumentar el valor añadido.

En cuanto al nuevo concepto de información documentada se refiere a flexibilizar la gestión documental de modo que se puedan respaldar todos los requisitos con información independientemente de su fuente o formato, esto acorde con las innovaciones tecnológicas en el manejo de la información. Asimismo la comunicación tanto interna como externa es un factor importante transversal a todos los demás.

El enfoque del ciclo PHVA (Planear – Hacer – Verificar – Actuar) se refuerza a través de la estructura de los capítulos y en general; de modo que cada proceso pueda completar el ciclo para asegurar la mejora continua.


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En resumen y para la adecuación de las organizaciones bolivianas a esta nueva versión de la Norma, creemos que los principales desafíos estarán en asegurar más que el compromiso, el involucramiento de la Dirección en todos los aspectos del Sistema de Gestión que realmente competen a su desempeño. De igual manera un gran desafío está en la gestión de Riesgos, ya que nuestra cultura tiende a hacernos más reactivos que preventivos. Lo mismo ocurre con asegurar el Ciclo PHVA ya que por la misma razón cultural tendemos a planificar adecuadamente (a veces en demasía); a ejecutar denodadamente pero fallamos cuando se trata de hacer seguimiento a lo ejecutado, verificar y proceder a la mejora.


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Silvia Katherine Fuentes Cortés

Consultora Senior en Implementación, auditorías y mantenimiento de Sistemas de aseguramiento de inocuidad, Pre-requisitos, Sistema HACCP, ISO 22000:2005; FSSC 22000; ISO 9001:2015; Responsabilidad Social Empresarial; Planificación Estratégica, etc. 

Capacitadora externa en empresas del sector alimentario e industrial, FUNDES, TAITA, IBNORCA, CAINCO, Gobierno municipal, etc.

Formación como Ingeniera en Alimentos – Master en Ciencias y Tecnología de Alimentos en la Universidad de Gent, Bélgica – Experto en Dietoterapia, Universidad de León. España.  









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